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Neste artigo para a Revista Cadernos Metrópole nº 38, Ricardo Méndez faz uma reflexão teórica sobre a metamorfose dos mercados de trabalho no capitalismo global, que culminou no fenômeno da “desposessão”, sofrido com desigual intensidade em função do grau de vulnerabilidade das diferentes áreas urbanas. A análise de Méndez propõe como recorte os efeitos da crise na Espanha, , posteriormente particularizada para a região metropolitana de Madrid. O autor coloca acento na influência que o modelo de acumulação financeirizado, sob regulação neoliberal flexibilizada/precarizada do mercado de trabalho, exerce sobre os territórios metropolitanos e nos desafios a serem enfrentados para a construção de espaços metropolitanos resilientes a crises.

O artigo “Crisis, desposesión y mercado de trabajo en España: impactos en la Región Metropolitana de Madrid” é um dos destaques do Dossiê Especial “Trabalho e território em tempos de crise”, presente na nova edição da Revista Cadernos Metrópole (nº 38).

Abstract

The Spanish urban areas have experienced a crisis that is global in its dimension but has different local manifestations. Such crisis has intensively affected the labor markets of these areas. Dispossession processes are reflected in the strong growth of unemployment, job insecurity, wage devaluation and less protection for workers, who are concentrated in the most vulnerable urban sectors. The article offers a theoretical reflection on these issues and analyzes what has happened in the metropolitan region of Madrid, in the Spanish context, by using different indicators. It also specifies deep internal disparities in the impact of the crisis within the agglomeration, which increase the territorial segmentation that has been inherited and pose new challenges.

Introducción

Por Ricardo Méndez

Los procesos de declive económico y deterioro de las condiciones de vida para buena parte de la población, junto al aumento de la desigualdad social y territorial provocada por la crisis iniciada en 2007 y profundizada por las políticas neoliberales de austeridad fiscal impuestas en la Unión Europea desde 2010, han tenido en España múltiples manifestaciones. El mercado de trabajo ha sido uno de los ámbitos donde el impacto ha sido más intenso, con la destrucción de varios millones de empleos, una creciente precariedad que se difunde hacia grupos profesionales y territorios que parecían inmunes, junto a una paralela devaluación salarial que polariza la pirámide laboral y aumenta la distancia entre sus extremos.

La crisis económica tuvo su origen en un proceso de financiarización que multiplicó los flujos de inversión en unos mercados globalizados y destinó buena parte de los mismos a potenciar un circuito secundario de acumulación ligado a la producción de espacio urbano como medio de lograr una elevada rentabilidad a corto plazo. Esas raíces urbanas de la crisis llevaran buena parte de sus efectos más negativos se concentren también en las ciudades, que muestran así la elevada vulnerabilidad acumulada durante la fase expansiva del ciclo inmobiliario.

Las aglomeraciones metropolitanas han mostrado en estos años una evolución contradictoria. Por una parte, concentran aquellas actividades y ocupaciones más intensivas en conocimiento que parecen haber resistido mejor los embates de la crisis, aunque sin evitar cierta precarización de los nuevos empleos generados. Al mismo tiempo, la inversión inmobiliaria – tanto residencial como empresarial – y la hipertrofia de la actividad constructora alcanzaron también en ellas elevados niveles, en paralelo a un fuerte incremento de los servicios al consumo como reflejo de una demanda que creció alimentada por la burbuja de crédito.

Como resultado, las ventajas competitivas asociadas a las externalidades que genera la aglomeración no evitaron un notable empeoramiento de todos sus indicadores laborales y el aumento de la segmentación socio-espacial interna. En consecuencia, comprender los desiguales efectos laborales que la crisis ha generado en ellas exige dirigir la mirada algo más lejos y considerar de qué modo el proceso de globalización regido por una racionalidad neoliberal transformó sus mercados de trabajo e incrementó su exposición a un riesgo que se hizo evidente al agotarse el ciclo expansivo de la economía española.

El artículo tiene como objetivo proponer un esquema interpretativo sobre estas cuestiones para analizar luego los efectos de la crisis sobre el mercado de trabajo español y centrar su atención en la región metropolitana de Madrid. En su primer epígrafe, el texto propone una interpretación de la metamorfosis padecida por los mercados laborales en el capitalismo global, para considerar luego los fenómenos de desposesión que caracterizan las crisis capitalistas y por qué las diferentes áreas urbanas los padecen con desigual intensidad en relación con su grado de vulnerabilidad.

El segundo apartado precisa la evolución del mercado de trabajo español desde 2007 en términos de actividad, ocupación y paro, calidad o precariedad del empleo, ingresos salariales, niveles de protección para los trabajadores y contrastes interurbanos observados. El tercero considera estos mismos aspectos en los municipios que superan los 25.000 habitantes dentro de la aglomeración madrileña y el efecto de la crisis en la creciente fragmentación del territorio metropolitano. En ambas escalas, la información procede de diferentes bases de datos publicadas por organismos públicos de ámbito estatal (Instituto Nacional de Estadística, Sociedad Pública de Empleo Estatal) o regional/autonómico (Instituto de Estadística de la Comunidad de Madrid). El artículo se completa con unas breves reflexiones finales sobre los retos a que se enfrentan mercados laborales como el madrileño y la necesidad de apostar por economías metropolitanas y modos de regulación que hagan compatible la recuperación del empleo con una sociedad y un territorio más inclusivos.

Acesse o artigo completo no site da Revista Cadernos Metrópole.

 

Última modificação em 12-04-2017 17:30:31